Me recuesto semidesnuda sobre el sillón
Acaricio mis labios con la punta del dedo meñique
Los muerdo, los aprieto, los saboreo…
Por más que intento recordar, tu nombre no viene a mi mente
Tu esencia sigue impregnada sobre mi alma
¿De quién son estos labios?
Mis ojos cansados comienzan a cerrarse
Los sueños indiscretos no esperan y comienzan a abandonar mi cuerpo
Andan a hurtadillas, rondando a mi libido
Le toman, le besan, le fuerzan, le violan…
Tu aroma sigue disperso en el aire y tu nombre oculto en silencio.
¿De quién son estos labios?
Despacio, en silencio, insegura; recupero mi conciencia
Muerdo una vez más mis labios y los tiño color carmín
De nuevo los aprieto, los saboreo, los acaricio…
Intento domarlos y hacerlos hablar
Para que digan tu nombre o me den un indicio de que aun te recuerdan.
¿De quién son estos labios?
Un helado silencio se apodera de mí
El carmín se lava poco a poco con mis lágrimas
Mis sueños se pierden y desaparecen con la luz del sol
Por un instante tu nombre se marca, se tacha y se vuelve a borrar de mí ser
Tu recuerdo y el mío se fusionan, se mezclan y desaparecen
Ahora, ya no recuerdo ni mi nombre
¿De dónde provengo? ¿Hacia dónde me dirijo?
¿A que sabe mi cuerpo? ¿Cuál es el aroma de mis sueños?
Me toco, me exploro y me intento reconocer
Al final solo hay algo de mí que no logro recordar; me pregunto.
Estos labios ¡ ¿De quién son?
Evonni VillaGo
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